La Comunidad de Valparaíso, a través de las dos parroquias que sirven, no se ha quedado atrás en el movimiento solidario generado en el país, con motivo de las consecuencias sociales y económicas de la pandemia.
En la Parroquia Ntra. Sra. del Carmen se ha facilitado la cocina parroquial, para la preparación de la comida de la olla común, que los mismos vecinos han organizado. Diez personas trabajan cada día -de domingo a domingo- para preparar cien porciones de comida, para alimentar a otras tantas personas.
En estos días, una vez decretada la cuarentena para Valparaíso, había surgido la preocupación de que quizá no s podría seguir realizando esta obra solidaria, pero afortunadamente, han conseguido un permiso especial para seguir funcionando. Se agrega, eso sí, un trabajo adicional para los voluntarios, por cuanto deberán ir a llevar los almuerzos a las casas de quienes lo necesitan.
El párroco, P. Mario Villar, cuenta que -gracias a Dios- no ha faltado ayuda para mantener esta olla común.
Por su parte, la Parroquia San Vicente de Paúl ha apoyado a algunas familias, con alimentos de los que se recolecta en tiempos normales y algo se pudo entregar, también al Colegio Santo Domingo, que está repartiendo almuerzos en la parte alta de Playa Ancha.
Además, la Comunidad local sigue apoyando a los fieles con la celebración y transmisión vía facebook, de la misa diaria, aunque por razones técnicas, se hayan visto obligados a transmitirla en diferido.