Agradecimiento de la JNJ, La Serena 2025

El domingo recien pasado concluyó la Jornada Nacional de la Juventud, en nuestra ciudad, donde la Parroquia San Marcelino Champagnat fue lugar de Acogida.

Monseñor Galo Fernández, Obispo de Talca y Presidente de la Pastoral Juvenil en Chile de la Conferencia Episcopal, junto a miembros de la Comisión visitaron nuestra parroquia para dar los agradecimientos por la JNJ y hacer entrega de un galvano.

Fuente: P. Rodis Christensen Z., CM, Párroco de San Macelino Champagnat.

Falleció Don Andrés Vargas Vargas, papá del P. Pablo Vargas Ruiz, C.M.

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El sábado 1 de febrero, ha partido a la Casa del Padre, el papá del Padre Pablo Vargas, Don Andrés Vargas Vargas. El fallecimiento se produjo, mientras trabajaba junto a su hijo, luego de ser atacado por abejas. El Padre Pablo le concedió los últimos auxilios espirituales.

Expresamos nuestras fraternas condolencias al Padre Pablo y a sus hermanos y familia, ante este doloroso y trágico acontecimiento, a la vez que elevamos oraciones por el eterno descanso de Don Andrés y el consuelo para su familia, en la esperanza de la resurrección.

El último adiós será el día martes 4 de febrero a las 15:00 horas en la Parroquia Hornopiren.

Fuente: https://radiovicentina.cl/2025/02/01/fallecio-don-andres-vargas-vargas-papa-del-p-pablo-vargas-ruiz-c-m/

 

Festival MAPPING

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El recién pasado sábado 25 de enero se vivió una proyección artística y comunitaria en diferentes puntos estratégicos de Valparaíso, que permitió disfrutar a vecinos y turistas de la historia de quienes habitan los cerros Bellavista y Florida, con el fin de recuperar su memoria patrimonial.

Un evento donde se combino tecnología, historia, arte y creatividad.

Este evento fue gratuito fue una experiencia inmersiva que transformaron icónicos, espacios, como nuestra Parroquia Nuestra Señora del Carmen mejor conocida como Iglesia Las Carmelitas, el Ascensor Florida, el Pasaje Prefecto Lazo y el Museo a Cielo Abierto, en lienzos vivos al aire libre de luz, color y memoria.

A través de proyecciones de imágenes históricas y diseños comunitarios, se recuperará la memoria patrimonial de estos cerros, celebrando su historia y espíritu colectivo.

El festival es fruto de una colaboración entre vecinos, artistas locales e internacionales y niños, quienes participaron en talleres interactivos donde crearon y digitalizaron sus propios diseños. Este esfuerzo no sólo remarca la identidad local, sino que también posiciona al arte como una herramienta de unión comunitaria.

El evento contó con la participación especial del músico local Pájaro Provinciano, quien lanzó su nuevo disco desde el balcón de su casa en el Cerro Florida, ofreciendo una fusión entre música y arte visual.

El evento, que recibió el apoyo de Sercotec, logró ser un atractivo imperdible tanto para los porteños como para turistas, consolidando a los cerros Bellavista y Florida como puntos destacados en el panorama cultural y turístico de la región.

Dirigido a personas de todas las edades, el Festival del Mapping ofrece una experiencia inclusiva y accesible que invita a redescubrir Valparaíso a través de su historia, arte y patrimonio. Más de 500 personas se dieron cita para disfrutar de este evento, que cautivo a todos los asistentes.

San Francisco de Sales, amigo de San Vicente de Paúl

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Hoy, 24 de enero, la Iglesia recuerda a San Francisco de Sales, patrón de los periodistas y escritores católicos a cuyo amparo e intercesión la Iglesia confía a todas aquellas personas que se dedican a la noble profesión del periodismo y al oficio de escribir.

La devoción y la defensa de la fe que caracterizaron a este santo y doctor de la Iglesia son puestas como modelo para los periodistas y escritores, cuyo norte debe ser siempre la difusión de la verdad y la edificación de la humanidad.

Desde este portal web gestionado por profesionales del medio, queremos felicitar y enviar nuestra gratitud a todos los compañeros comunicadores que trabajan fielmente al servicio de la verdad y la información, su compromiso, responsabilidad y ética, asumiendo la grandeza de informar, comunicar y establecer grandes lazos con todas la comunidades.

San Francisco y San Vicente de Paúl

En octubre de 1618, Francisco llega por tercera vez a París. Será en esta ocasión, que sepamos con seguridad, cuando Vicen­te de Paúl va a tener la oportunidad de conversar e intimar direc­ta y largamente con el santo Obispo de Ginebra.

La estancia de Francisco en París se prolongará durante todo un año. A este encuentro llega un Francisco de Sales que, según su propia confesión, «ya iba declinando su vida hacia la vejez», pero, sobre todo, llega un obispo que ha plasmado en su vida el modelo delineado por el Concilio de Trento, y un santo que des­borda amor de Dios en el trato personal e irradia ese amor en el corazón de sus interlocutores. Su figura suscita admiración y reconocimiento universal, desde la gente sencilla de su diócesis hasta el grupo elevado de numerosos espirituales que se esfuer­zan por la renovación de la Iglesia en Francia. La misma nobleza y Corte Real se disputan su presencia.

2.1. Encuentro y ternas a tratar

Francisco de Sales llega a París para solicitar la mano de la joven Cristina, hermana de Luis XIII, para el Príncipe del Piamonte, primogénito de su Alteza Carlos Manuel. Hasta entonces, desde 1602, invariablemente el Duque se había opuesto a su pre­sencia en la Corte de París. Ahora, Francisco gozará de todo un año, entre octubre de 1618 y septiembre de 1619, para responder a las solicitudes de quienes quieren escuchar su predicación, recibir sus consejos y orientaciones, charlar y confesarse con él. Entre aquellos a los que el Santo Obispo de Ginebra va a prestar especial atención, figura Vicente de Paúl.

Sin duda, Vicente conocía ya mucho del santo Obispo. La huella que Francisco había dejado en la Corte y en el pueblo de París con sus más de cien predicaciones durante 1602, se mante­nía profunda y activa. Pero, en particular, seguía vivo el rescol­do de su animación espiritual en el entorno del círculo de Madame Acarie. Vicente participaba sin duda de ese aprecio e influjo de la espiritualidad del santo Obispo de Ginebra.

Conocía al Santo Obispo por su doctrina espiritual, amplia­mente divulgada a través de la publicación en 1608 de la Intro­ducción a la «Vida Devota», que, según confiesa el mismo Fran­cisco, «ha sido muy bien acogida en Francia», y seguramente también a través del «Tratado del Amor de Dios», cuya primera edición es de 1616.

Y es probable que lo hubiese tratado personalmente en su época de párroco de Chátillon-les-Dombes, perteneciente a la diócesis de Lyón, a donde Francisco acudía a predicar y donde acababa de establecer el primer monasterio de la Visitación fuera del Ducado de Saboya. Ciertamente las reglas de la Cofradía de la Caridad están inspiradas en la Introducción a la Vida Devota. Además parece difícil explicar la amistad tan íntima y familiar que surgirá de pronto entre los dos santos a raíz del encuentro de París. Sin embargo, carece de fundamento la afirmación de un primer encuentro el año 1602.

Según Pedro Coste, el primer encuentro directo y personal entre Francisco y Vicente de Paúl, al menos en París, tuvo lugar seguramente a finales de diciembre de 1618. Cuando Francisco de Sales llega a París el 10 de noviembre, Vicente de Paúl esta­ba de visita por tierras de Montmirail en compañía de la Señora de Gondi. El intermediario de ese primer encuentro fue proba­blemente Pedro de Bérulle, con quien Francisco de Sales trató sobre la formación del clero. Pero a ese primer encuentro siguie­ron otros más personales, seguramente a través de los señores de Gondi, que se movían en el círculo del ilustre visitante y aprecia­ban sobremanera al señor Vicente. No hay que olvidar que el entonces obispo de París era el Cardenal de Gondi, quien traza­ría un plan para retener a Francisco en París, proponiéndole el nombramiento de coadjutor con derecho a sucesión.

Si tuviéramos que hacer un guión de los coloquios manteni­dos entre los dos santos, anotaríamos los siguientes puntos:

El tema eclesial, especialmente en lo referente a la refor­ma del clero y a la evangelización del pueblo sencillo y la atención a los pobres.

El tema personal, que permite a Vicente compartir con el Santo Obispo sus inquietudes apostólicas y la vocación a la que se siente llamado.

El coloquio y la intimidad espiritual que se establece entre los dos.

2.2. Plena sintonía y gran familiaridad

El mutuo aprecio y familiaridad que surge entre los dos, hace suponer a P. Coste que los dos santos estaban «hechos para comprenderse amarse». En la misma línea se manifiesta Luis Abelly, al considerar la elección que Francisco y la Madre Chan-tal hacen de Vicente para Director del monasterio de la Visita­ción recién fundado en París, a pesar de que «había por aquellos días en París varios sacerdotes sabios, virtuosos y de más edad que el señor Vicente».

En este caso no se trataba sólo de una impresión, sino que res­pondía a la realidad de una relación íntima. Así nos lo confirma­rá Vicente en diversas ocasiones y de forma solemne en la Decla­ración tomada a Vicente el 17 de abril 1628 para la Beatificación de san Francisco. «Muchas veces me honré con el trato de Fran­cisco de Sales», confiesa Vicente. «Añadiré además —continúa—, basándome en el trato familiar con que me honró, que abriendo conmigo su corazón me dijo una vez que, cuando predicaba, se daba cuenta de que alguno le movía interiormente»’.

El nivel de la confianza depositada por Francisco de Sales en Vicente, lo expresa una confidencia que el Santo Obispo le con­fía en presencia de la Madre Juana Francisca Frémiot, viuda de Chantal, que había llegado a París el 6 de abril de 1619, llamada por Francisco para la fundación del nuevo monasterio de la Visi­tación. Les confía el mismo Francisco: «¡Qué bien he humillado a nuestras hermanas, que se esperaban que iba a decir maravi­llas en tan buena compañía!». Se trataba del primer sermón que Francisco predicó al día siguiente de su llegada a París en pre­sencia de la corte y del auditorio más selecto. Este tipo de con­versaciones tan íntimas no eran casuales, sino habituales. En otra ocasión llegó a confesar a Vicente que no podía leer sus pro­pios escritos sin llorar. «Supe de su propia boca por haberlo visto en su trato familiar, que solía derramar lágrimas, cuando repasaba los capítulo de los libros que él mismo había compues­to, pues se daba cuenta de que todas aquellas cosas las había escrito tan excelentemente, no por su propio ingenio, sino bajo la inspiración de Dios». La confianza e intimidad con que le solía tratar el santo Obispo hace exclamar a Vicente en un momento de su Declaración en el proceso de Beatificación: «Sé a ciencia cierta».

Por su parte, la admiración y veneración que Vicente de Paúl llegó a profesar a san Francisco de sales, creció de día en día. «Cuando repaso en mi mente las palabras de este siervo de Dios, excitan tanto mi admiración que me muevo a creer que ha sido el hombre que mejor copió al Hijo de Dios, mientras moró en esta tierra». Llamó especialmente la atención de Vicente la bondad desbordante que transmitía en sus conversaciones perso­nales al hablar del amor de Dios. Esto le hizo exclamar en una ocasión en que repasaba en su interior la idea de la bondad de Dios, que Francisco le había manifestado: «¡Qué bueno eres, Dios mío, cuando tan amable es esta criatura vuestra!».

A Vicente que, según Abelly, «era de natural bilioso y de un temperamento vivo y, por consiguiente, muy inclinado a la cólera», se le grabó en el fondo del alma este modelo. Ya antes se esforzaba en moderar su temperamento, que, además, inquie­taba especialmente a la señora de Gondi, porque pensaba que estaba disgustado por alguna queja contra su casa. Desde el encuentro con Francisco de Sales intensificó este esfuerzo. Nos cuenta Abelly «que la primera vez que lo vio, reconoció enseguida en su aspecto, en la serenidad de su rostro, en la manera de tratar y de hablar una imagen muy clara de la man­sedumbre de Nuestro Señor Jesucristo, que le había ganado el corazón».

Pero también Francisco de Sales, refiere su confesor Miguel Favre, había declarado «que no era dulce tanto por inclinación natural como por esfuerzo”. Más aún, como un día su herma­no, probablemente Juan Francisco, le mostrase su admiración por como había dominado su cólera, el Santo le confesó que «en muchas ocasiones, la cólera le hervía en el cerebro como hierve el agua en un cacharro puesto al fuego, pero que por la gracia de Dios, aunque tuviera que morirse por la violencia que tenía que hacerse para resistir esa pasión… jamás diría una palabra en su defensa».

En el retiro de Soissons de 1621, según asegura P. Collet’, Vicente le rogó a Dios que le cambiase ese temperamento brus­co y le concediese uno dulce y benigno. Poco después, nos dice Jean Calvet, quedó curado por una gracia especial, precisamen­te a la muerte de Francisco de Sales en 1622, como si fuese «la última sonrisa de su amigo’. Ya al final de su vida, confiesa a sus misioneros con evidente humildad: «Hace tanto tiempo que estudio esta lección y todavía no me la he aprendido».

Lo que el mismo Vicente recomienda al P. Codoing, es que desconfíe de los fervores naturales, ya que el espíritu de Dios procede con suavidad y con toda humildad. Y le confirma que, al comienzo de proyectar la Misión, hizo expresamente un retiro en Soissons por ese motivo, y añade: Dios quiso escucharme.

José Mª López Maside,

CEME, 2008

Admisión al Seminario Interno

La mañana de este lunes, 20 de enero, memoria litúrgica del mártir San Sebastián, en la ciudad de Belo Horizonte, Provincia Brasileña de la Congregación de la Misión, se celebró una muy solemne Eucaristía presidida por el P. Vandeir Barbosa de Oliveira Visitador de la misma Provincia. En esta Santa Misa nuestros estudiantes: Daniel Vallejos y Jeffrey Zúniga fueron admitidos oficialmente en nuestra Congregación.

En la homilía el P. Vandeir señaló tres puntos: 1°) la belleza de un Seminario Interno Internacional; 2°) la importancia de las virtudes vicentinas en la formación, «son como el corazón del Evangelio» y 3°) finalmente habló de las Bienaventuranzas como un camino de vida Vicentina.

Junto a nuestros Seminaristas ingresaron: uno de la Provincia de Perú; uno de la Vice Provincia de Costa Rica; uno de la Provincia de Argentina; uno de la Provincia de Mexico; uno de la Provincia de Rio de Janeiro y cuatro de la Provincia de Curitiba.

Oramos por la perseverancia de estos hermanos nuestros en la vivencia de esta hermosa experiencia.

Carta del Santo Padre por el 400 aniversario de nuestra Congregación

El Santo Padre Francisco ha hecho llegar al superior general y a toda la Congregación, la siguiente carta, con motivo de los 400 años del contrato de fundación de la Congregación de la Misión.

«Rezo para que este 400 aniversario sea ocasión de alegría y de renovada fidelidad para la visión del discipulado misionero, basado en la imitación del amor preferencial de Cristo por los pobres» 

Papa Francisco

5 puntos importantes de reflexión:

1. RENOVAR LA FIDELIDAD A LA VISIÓN MISIONERA

2. INSPIRACIÓN PARA QUE LOS JÓVENES CONSTRUYAN UN MUNDO MEJOR

3. MISIÓN Y FORMACIÓN DEL CLERO

4. IMPORTANCIA DEL SERVICIO A LOS MÁS NECESITADOS

5. IMITAR EL AMOR PREFERENCIAL DE CRISTO POR LOS POBRES

 

 

La Compañía de los Sacerdotes de la Misión: la misión anglicana en el espíritu de San Vicente

La Compañía de los Sacerdotes de la Misión (CMP) es una orden anglicana que se ha entregado al servicio de las comunidades desfavorecidas desde su creación durante la Segunda Guerra Mundial. Los fundamentos de la CMP se centran en la misión, la atención pastoral y la evangelización, enraizados en las enseñanzas y el ejemplo de San Vicente de Paúl.

Orígenes y desarrollo histórico

La Compañía de los Sacerdotes de la Misión nació en los albores de la Segunda Guerra Mundial. Auspiciada por tres Comunidades Religiosas Anglicanas y el Arzobispo de Canterbury, su propósito original era proporcionar sacerdotes para atender a las poblaciones evacuadas en lugares donde no se podía disponer del grado normal de alojamiento y remuneración.

Así pues, estos Sacerdotes de la Misión tendrían que ser solteros y estar dispuestos a compartir alojamiento, medios económicos y gastos. Después de la guerra, se confiaba en que estos sacerdotes pudieran prestar servicio en las grandes barriadas de viviendas, donde los recursos eran escasos y la necesidad de atención pastoral y misión era grande.

Esto fue exactamente lo que ocurrió. Después de la guerra, los sacerdotes de la CMP, tanto en equipo como individualmente, sirvieron ejemplarmente en algunas de las zonas más necesitadas de Gran Bretaña, y también en el extranjero, en Guyana, Madagascar y otros lugares.

Lamentablemente, en la década de 1990, una crisis en la Iglesia de Inglaterra en torno a la ordenación de mujeres llevó a la mayoría de los sacerdotes de la CMP a retirarse de la Compañía y unirse a la Iglesia Católica Romana.

Para la minoría que permanecía en la Iglesia de Inglaterra, bien podría haber parecido que la vida y el trabajo de la Compañía habían llegado a su fin. Pero de esta triste situación surgió, por la gracia de Dios, un nuevo comienzo, nueva vida y crecimiento cuando la Compañía adoptó a San Vicente de Paúl como su patrón segundo, y ha crecido en una estrecha relación con la Familia Vicenciana mundial formada por congregaciones religiosas y organizaciones laicas, inspirándose y guiándose por el innovador trabajo de San Vicente de Paúl en la misión, la evangelización y el cuidado pastoral.

Espiritualidad e influencia vicenciana

San Vicente de Paúl, célebre sacerdote francés conocido por su dedicación al servicio de los pobres, se convirtió en el patrón de CMP en su etapa de renovación posterior a la década de 1990. El legado de evangelización, caridad y trabajo misionero de San Vicente resuena profundamente en la misión y espiritualidad de la CMP. Su visión del servicio cristiano enfatiza la humildad, la sencillez y la dedicación compasiva a los demás, valores que se alinean estrechamente con el espíritu de la CMP.

La conexión de la CMP con la Familia Vicenciana se ha hecho más profunda, fomentando la colaboración con congregaciones religiosas y organizaciones laicas arraigadas en la espiritualidad vicenciana. Esta afiliación amplía la comunidad de las CPM, centrada en el trabajo misionero y la justicia social, y refuerza su impacto a través de valores compartidos de humildad, colaboración y defensa de los pobres. Los sacerdotes de la CMP participan activamente en las iniciativas para aliviar la pobreza y proporcionar atención espiritual, participando en reuniones vicencianas mundiales para compartir estrategias que permitan servir mejor a las comunidades vulnerables.

Áreas de ministerio y actividades

Los sacerdotes de la CMP atienden a las comunidades en varias zonas problemáticas y desatendidas, especialmente en el Reino Unido. Trabajan en parroquias anglicanas, centros urbanos y regiones rurales, centrándose en la atención pastoral, la evangelización y la promoción comunitaria. Sus servicios incluyen:

  • Atención pastoral: Los sacerdotes de CMP proporcionan asistencia espiritual a personas y familias, atendiendo a sus necesidades materiales y emocionales.
  • Evangelización: El trabajo misionero sigue siendo una piedra angular del ministerio de la CPM, con sacerdotes comprometidos en difundir el mensaje cristiano en comunidades que puedan carecer de atención pastoral ordinaria.
  • Justicia social y abogacía: Inspirada por los ideales vicencianos, la CMP aboga por la justicia social, centrándose en los problemas que afectan a las poblaciones marginadas, como la pobreza y la falta de vivienda.

Más allá del ministerio local, los miembros de la CMP participan en misiones internacionales, continuando la tradición de la institución de llevar el ministerio anglicano a lugares necesitados de todo el mundo.

El legado y los retos actuales de la CMP

Ante el cambiante panorama social y eclesiástico, la CMP sigue evolucionando. La Compañía sigue comprometida con su misión fundacional de servir a los necesitados, al tiempo que se adapta a los nuevos retos de la Iglesia Anglicana y de la sociedad. Los miembros de la CMP están unidos por una vocación compartida de vivir con sencillez, con recursos comunitarios dedicados a apoyar la misión, reflejando su espiritualidad de inspiración vicenciana.

El impacto del trabajo de la CMP se puede ver en las vidas de las comunidades a las que sirven, donde su compromiso con la atención pastoral y la proyección social aporta esperanza y apoyo espiritual. A pesar de los desafíos modernos, la CMP continúa llevando adelante su patrimonio de servicio y misión, encarnando la compasión y la dedicación de San Vicente de Paúl.

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La Compañía de los Sacerdotes de la Misión es un ejemplo del poder de la fe y del servicio impulsado por la misión. A través de su compromiso permanente con las enseñanzas de San Vicente de Paúl, los sacerdotes de la CMP sirven como faros de esperanza en la tradición anglicana, ofreciendo atención pastoral, fomentando la evangelización y atendiendo las necesidades de las personas marginadas. En colaboración con la Familia Vicenciana, el trabajo de la CMP representa un legado vivo de caridad cristiana, resiliencia y abnegación.

Fuente: https://famvin.org/es/2025/01/15/la-compania-de-los-sacerdotes-de-la-mision-la-mision-anglicana-en-el-espiritu-de-san-vicente/?utm_source=facebook&utm_medium=jetpack_social

10 Razones por las que un Joven debería Unirse a la Congregación de la Misión como Misionero Vicenciano

¡He aquí diez razones por las que un joven de hoy se beneficiaría de entrar en la Congregación de la Misión y una oración para pedir a Dios discernimiento por intercesión de San Vicente de Paúl!

San Vicente de Paúl, fundador de la Congregación de la Misión, dijo: “Los pobres son nuestros maestros”. Esta frase resume el corazón del carisma vicenciano y la razón por la cual la vocación misionera puede ser un camino de gran enriquecimiento personal y espiritual. Unirse a la Congregación de la Misión como misionero ofrece una oportunidad extraordinaria para vivir una vida llena de significado, dedicada al servicio de los demás y al crecimiento interior.

Aquí tienes diez razones por las que un joven de hoy en día se beneficiaría al unirse a la Congregación de la Misión:

Crecimiento Espiritual:

Unirse a la Congregación de la Misión ofrece una oportunidad única para crecer espiritualmente a través de la oración, la meditación y la participación en los sacramentos, siguiendo el ejemplo de San Vicente de Paúl.

Servicio a los Pobres:

La misión principal de la Congregación es servir a los pobres y marginados. Esto permite a los jóvenes hacer una diferencia concreta en la vida de las personas necesitadas, siguiendo el carisma vicenciano.

Formación y Educación:

La Congregación ofrece una sólida formación teológica, pastoral y humana, preparando a sus miembros para servir eficazmente como misioneros y líderes en la Iglesia y en la sociedad.

Comunidad Fraterna:

Vivir en comunidad con otros misioneros proporciona un entorno de apoyo, amistad y crecimiento mutuo. La vida comunitaria es un aspecto fundamental de la vocación vicenciana.

Experiencia Internacional:

La Congregación de la Misión opera en todo el mundo. Los jóvenes misioneros tienen la oportunidad de trabajar en diferentes culturas y contextos, enriqueciendo su experiencia y comprensión global.

Desarrollo de Habilidades:

Además de la formación espiritual, los misioneros desarrollan habilidades prácticas en diversos ámbitos como la educación, la asistencia sanitaria, la gestión de proyectos y el trabajo social.

Testimonio de Fe:

Ser misionero significa testimoniar la propia fe de manera concreta y visible, inspirando a otros con el ejemplo de vida y el compromiso hacia el prójimo.

Adaptabilidad y Resiliencia:

Trabajar en contextos misioneros a menudo difíciles ayuda a desarrollar una fuerte adaptabilidad y resiliencia, cualidades valiosas en cualquier aspecto de la vida.

Parte de una Gran Familia:

Unirse a la Congregación de la Misión significa convertirse en parte de la gran Familia Vicenciana, que incluye varias ramas y asociaciones laicas, creando una vasta red de apoyo y colaboración.

Respuesta a una Llamada Profunda:

Para muchos jóvenes, ingresar en la Congregación representa la respuesta a una llamada interior a seguir a Jesucristo de manera radical, dedicando su vida a la evangelización y al servicio de los demás.

 

Si sientes en tu corazón el deseo de hacer una diferencia en el mundo y de vivir una vida llena de significado, considera seriamente la posibilidad de unirte a la Congregación de la Misión. La llamada a servir a los pobres y marginados es una de las más nobles que puedes recibir, y tu vocación podría ser la respuesta a las necesidades de muchos.

Si te encuentras en una encrucijada y estás tratando de discernir tu vocación, te invitamos a unirte a nosotros en una novena de oración para pedir luz y guía al Señor. Te proponemos recitar cada día durante nueve días la siguiente oración de discernimiento vocacional. Que sea un momento de intimidad con Dios para escuchar Su voz y dejarte guiar por Su amor y Su sabiduría.

Oración de Discernimiento Vocacional

Señor Dios, fuente de toda sabiduría y amor,
ilumina mi corazón y mi mente
mientras busco discernir Tu voluntad para mi vida.
Concédeme la gracia de escuchar Tu voz
en el silencio de la oración y en las necesidades del mundo.

Guíame con Tu luz divina
para que pueda comprender si la llamada a la Congregación de la Misión
es el camino que has preparado para mí.
Da fuerza y ​​coraje a mi espíritu
para que pueda responder con generosidad y confianza.

San Vicente de Paúl, intercede por mí para
que pueda seguir tu ejemplo de servicio y amor por los pobres.
Que pueda ser un testigo fiel de Tu misericordia
con todo mi corazón, mi alma y mi vida.

Amén.

Fuente: https://congregatiomissionis.org/es/2024/12/31/jovenes-vicentinos/

Primer día CEVAS en Porvenir

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El lunes 6 de enero, recibiendo un centenar de niños y niñas entre los 6 y los 12 años se congregaron entre la SUM y el albergue municipal para dar inicio a los CEVAS DE VERANO, que nuestra Parroquia San Francisco de Sales promueve para darles actividades de formativas y recreativas a aquellos y aquellas que no tienen la posibilidad de salir de vacaciones, la idea es dar dos semanas de recreación en nuestra localidad, apoyados por diferentes instancias, animadores y la comunidad completa.

Se espera continuar haciendo vida el llamado de Jesús a acoger y acompañar a los niños que necesitan de un poco de cariño.